El firmamento volvió a ser el gran protagonista de una de las noches más esperadas del verano, la madrugada del 9 al 10 de agosto: la de nuestros fuegos de San Lorenzo y esta con agua de lluvia, como si de un ritual se tratase, una bendición del santo. Un espectáculo pirotécnico de 410 kilos de pólvora, obra de Pirotecnia San Miguel, que volvió a ser un éxito, atractivo y único. Una cita anual marcada en rojo en el calendario de las miles de personas que acudieron para disfrutar de este espectáculo de luz, pólvora y color, que dejó con la boca abierta y medio sordo, especialmente en el punto y final que puso la quema de los volcanes, haciendo vibrar la isla. Esto obra de los vecinos dirigidos por D. Rafael García y la Pirotecnia Canarias.
Antes de los fuegos, tuvimos el 16º concierto de la banda de rock Overbooking.
